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Fija metas todo el año, no solo en Año Nuevo

No te vayas a limitar por las tradiciones.


Muchos de nosotros fijamos el 1 de enero como la fecha en donde finalmente comenzaremos la misión de resolver grandes metas y planes. Está bien, en ocasiones es importante contar con una “meta de salida”; sin embargo, la estrategia cuenta con un error fundamental.

A Tal vez a medio año, o en febrero, incluso en esta segunda semana del año, diversos obstáculos se interpondrán en el camino y todas esos grandes objetivos se irán apagando poco a poco. Esto es porque el establecimiento de metas no debería ser un evento anual, sino que debe convertirse en parte de nuestra rutina habitual.

¿Cómo lograrlo? A continuación te entregamos varios consejos:

 

  1. Divide tus objetivos en «micropasos»

Todos hemos escuchado el mantra de que al establecer metas tienes que dividir el proceso en pequeños pasos, pero estos tienen que ser mucho más pequeños de lo que pensamos. Si tu meta es tener un estilo de vida más saludable, el primer paso no puede ser «hacer ejercicio tres veces por semana». El verdadero primer paso debe ser ponerse los tenis. El cerebro humano batalla con el cambio, por lo que debemos engañarlo para que adopte el nuevo hábito.

Escribe cada paso como lo harías con una receta de cocina: preparar la mochila para el gimnasio, poner la mochila en el auto, programar horario de gimnasio en el calendario. Conduce al gimnasio.

 

  1. Rodéate de tus metas todos los días

Si alguna vez has intentado aprender un nuevo idioma, sabes que para aprenderlo tienes que estar metido en él 24/7: hablarlo todos los días, escuchar música, leer libros y demás.

El mismo proceso se aplica a la fijación de objetivos. Rodearte de tus objetivos te ayudará a realizarlos. Escribe tus metas y déjalas enfrente de tu monitor, verlas en el centro de tu vida cotidiana le dice a tu cerebro que esto es importante y te permite tomar decisiones orientadas a cumplir con ellas.

 

  1. Programa check-ins cada 90 días

Fracciona los pasos a seguir y revisa tu posición cada tres meses. De esta forma, no solo te mantienes en el camino sino que te permite verificar y determinar si aún estás en línea a cumplirlas o si algo ha cambiado en tu vida y necesitas modificar ese objetivo de alguna manera.

Entonces, antes de olvidarte por completo de tus resoluciones de Año Nuevo, programa estos consejos en tu calendario y busca alcanzar metas cada día del 2019 y no solo pensar en ellas hasta diciembre.

 

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