Tus buenas ideas se hacen más fuertes e inteligentes al compartirlas y actuar.
Muchas veces reprimimos nuestras aspiraciones o intereses laborales , y olvidamos que es egoísta no usar lo que tenemos y lo que sabemos. Descubre si eres una de esas personas que desperdician sus talentos.
¿Te estás reprimiendo en el trabajo?
¿Podrías ser consejero de alguien nuevo? ¿Incluyes tu valiosa voz y experiencia a un proyecto? ¿Hay algún interés en tu interior que hayas tenido demasiado miedo de expresar? ¿Dónde y cómo estás desperdiciando tu inteligencia y tus buenas ideas? No te preocupes, no se agotan. Se harán más fuertes e inteligentes al compartir y actuar.
¿Eres un acaparador?
Y no, tus armarios no necesitan desbordarse para que esto se aplique a ti. ¿Acumulas cumplidos, tu tiempo, tu generosidad, tu amor? ¿Dónde puedes ser más generoso – y perdonar – en el mundo? ¿Podría un amigo que está pasando por un momento difícil usar tu sabio consejo? ¿Quizás un pariente que te perjudicó finalmente merece algo de tu compasión? Tu sola presencia es un regalo. ¡No la desperdicies!
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¿Estás fracasando en convertir los sueños en planes?
¿Te aferras al miedo en lugar de buscar lo que te llama? Tal vez sueñas con mudarte y trabajar en un campo completamente diferente, pero ese cheque de pago y el contrato de renta de buen valor son demasiado cómodos. ¿Estás poniendo tus aspiraciones en un agujero? Puede que no parezca un comportamiento miserable, pero lo es. Porque la versión más inspirada de ti impactará en el rincón del mundo que tocas mil veces más que una reiteración mediocre de ti mismo.
¿Dónde podrías estar guardando tu oro? ¿Y dónde puedes empezar a ponerlo en uso, a partir de esta semana? Un ladrón puede no ser capaz de robar lo que hay dentro de ti, pero el tiempo lo hará. Si tus dones están sin usar, es como si no existieran. Se erosionarán, y cada vez que dejas pasar una oportunidad para usarlos, debilitas tu riqueza.
Usa lo que te fue dado – te lo debes a ti mismo y a los que te rodean.
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